Es hija de un minero de corazón, dice. Irene Berenice Rojas Gallegos trabaja en control de energía - área de mantenimiento, en la Sección 30 de Naica, Chihuahua.
Además de su papá, José Alfredo Rojas Ramos, el esposo de Irene, Saúl Magdaleno Díaz también es minero. Irene se dedica a la minería desde el 7 de diciembre de 2006. Sobre el por qué se decidió por este trabajo, dice: “Me gusta la minería y conocer la extracción de sus valiosos minerales”.
¿Qué te ha dejado la minería en el aspecto personal?
--Al respecto, conozco la mina, sus temperaturas, sus lugares de peligro y valoro a mi padre y esposo porque su trabajo es valioso. Estoy orgullosa de tenerlos a mi lado pues somos responsables, dedicados a nuestro trabajo.
Se siente orgullosa de la labor que diariamente desempeña en la mina. “Mi gran logro es que cumplo a diario con mi trabajo y estoy en un área de mucha responsabilidad, sé que por mi dedicación he llegado a estar en esta grandiosa área de trabajo. Estoy muy feliz por mis logros”. Subraya que nunca ha padecido algún tipo de impedimento o maltrato en su centro de trabajo por ser mujer. “No, yo siempre cumplo en todo el aspecto laboral y cuando requiero apoyo están de mi lado y me motivan con pláticas de seguridad, me doy cuenta que mis compañeros se preocupan por mí siempre”.
No obstante, Irene Berenice apunta que la discriminación laboral hacia la mujer no está del todo suprimida en México. “Sigue existiendo en algunos trabajos, por la razón del machismo, pero la realidad es que la mujer es más responsable y dedicada. Tenemos derecho a salir adelante con nuestra familia”.
Sobre el que se festeje el Día Internacional de la Mujer, apunta: “Es estupendo, es un festejo que las mujeres tenemos, pero a diario se nos festeja por ser trabajadoras, dedicadas y unas excelentes madres”.
