¡Más que un impuesto ecológico, tiene sentido de recaudatorio!

El pasado 14 de febrero, con la solicitud al máximo tribunal de justicia del país, para que ordene cesar todos los efectos y consecuencias jurídicas derivadas de la aplicación del llamado “impuesto minero”, Tello propuso el nuevo gravamen como una forma de captar alrededor de $2,500 millones de pesos para atender el déficit que hoy tiene el presupuesto estatal, gracias a las Administraciones de Amalia García y Miguel Alonso Reyes.

El Gobernador zacatecano ha dicho en diferentes ruedas de prensa que Zacatecas no tiene dinero para apoyar a los servidores públicos para generar el cambio que plasmó en sus objetivos de campaña, que el estado requiere de ingresos. Aunque ha mencionado que “los mineros afirman que no pagaran lo que les robaron”, el gobernante insiste que este impuesto tendrá beneficios para la entidad.

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El Sol Zacatecano
23 de Febrero de 2017