Carlos Pavón Campos, como primer secretario general del Sindicato Nacional Minero Metalúrgico Napoleón Gómez Sada, señala que el nacimiento de este gremio tiene como principal objetivo darle certeza laboral a los trabajadores y sus familias, lejos de las extorsiones que por años soportaron los mineros de manos de oscuros personajes cuyo único afán era convertir al sindicato en un negocio familiar.

¿Por qué la decisión de formar un nuevo sindicato minero?

Porque los trabajadores de las industrias minera, metalúrgica, siderúrgica y actividades relacionadas necesitan una alternativa fresca, fuerte y comprometida con ellos. Nuestro principal objetivo es recuperar la esencia del sindicalismo minero, la cual se perdió desde el año 2000. Los trabajadores mineros necesitan un sindicato que verdaderamente los represente y nosotros somos esa opción. Aquí escuchamos la voz de todos los mineros.

¿Cuál es el objetivo principal del sindicato que encabeza?

Primero, darle certeza jurídica al gremio. Nosotros sí tenemos toma de nota y estamos reconocidos jurídicamente como organización sindical. Esto quiere decir que cerca de los siete mil compañeros que están con nosotros están representados plenamente ante cualquier intento de despido injusticado o agresión empresarial. También buscamos darle a los compañeros mineros y sus familias la estabilidad laboral que necesitan, mejores condiciones de vida a través de nuestras negociaciones contractuales.

¿Cómo es la relación que llevan con las empresas?

Es de mutuo respeto. Nosotros no necesitamos estallar huelgas o realizar paros para extorsionar a las empresas como lo hacen otros personajes. Eso se ve reejado en el bolsillo de los trabajadores, quienes al no estar en paros innecesarios, gozan de salarios y prestaciones seguras. Además, la industria minera nos ve con buenos ojos porque somos un sindicato serio que coadyuva en la creación de fuentes de empleos en muchas ciudades que dependen económicamente del desarrollo de las minas.

¿Cómo sindicato ustedes están en contra de las huelgas?

Nosotros no renunciamos al derecho de huelga, ya que ésta es un arma de los trabajadores en contra de las agresiones empresariales, pero ese derecho será ejercido cuando así lo determine la base trabajadora en forma voluntaria y de común acuerdo, siempre en benecio de la colectividad y no de un solo personaje. En este sindicato el diálogo será la constante, no las huelgas para amedrentar al patrón o al propio gobierno como lo hacen otros personajes desde el autoexilio.

¿Cómo va el sindicato que usted dirige?

Vamos bien, con rumbo, con éxito en nuestras negociaciones colectivas. Nuestros aliados tienen estabilidad laboral y estamos en plena expansión gremial. Hay algunas secciones que se han acercado a nosotros para aliarse. Eso nos da la certeza de que estamos haciendo bien las cosas, respetando nuestros estatutos y escuchando la voz de los mineros.

“Este sindicato nace con tres grandes ejes rectores: democracia interna, honestidad y transparencia sindical”

CARLOS PAVÓN CAMPOS